La eficacia de la inyección de toxina botulínica A en el tratamiento de niños con parálisis cerebral espástica se ha documentado con mediciones objetivas en múltiples estudios. Se ha logrado objetivos como: a) Mejorar la función motora; b) Aumentar el intervalo de movimiento articular pasivo y activo; c) Prevenir o mejorar la contractura muscular y las deformidades articulares; d) Prevenir la subluxación o dislocación de la cadera y la escoliosis; e) Disminuir el dolor durante los movimientos pasivos y activos; f) Facilitar la terapia física; g) Favorecer la aplicación y acción de las ortosis; h) Evitar posponer un procedimiento quirúrgico para un momento mas oportuno, en relación con el desarrollo; i) Facilitar la atención de higiene; k) Mejorar la apariencia estética, y l) Mejorar la calidad de vida del paciente y de sus familiares.
La inyección de toxina botulínica A en músculos seleccionados de niños con parálisis cerebral espástica constituye un procedimiento bien tolerado, seguro y eficaz, dentro de las estrategias actuales para el tratamiento de la parálisis cerebral. Los resultados de su aplicación dependen, en gran parte, de la selección apropiada del paciente y del músculo o músculos que se pueden beneficiar de la inyección de toxina botulínica A. La necesidad de documentar objetivamente la condición inicial del paciente y los resultados de cualquier procedimiento terapéutico
Terapias de rehabilitación
La terapia física se dirige a mejorar la fuerza, flexibilidad, margen de movimiento, patrones de movimiento y , en general, las discapacidades motoras básicas para la movilidad funcional en el entorno. La terapia ocupacional se encamina a mejorar las capacidades cognitivas, de autocuidado, visuoperceptivas, motoras precisas, la integración sensoriomotora y la función psicosocial. La terapia de habla y lenguaje pretende facilitar la coordinación de la respiración, fonación y movimientos promotores para la producción de sonidos, y las capacidades y el empleo del lenguaje hablado. Las metas principales de un programa de rehabilitación física son : disminuir el impedimento, reducir la incapacidad y optimizar la función. Los distintos métodos de rehabilitación se han enfrentado al desafío de presentar evidencias de su utilidad.
Ortosis
Existen varias razones para considerar el empleo de férulas y ortosis. Pueden utilizarse simplemente para compensar la paresia del segmento de una extremidad, para prevenir la deformidad secundaria a contracturas o para disminuir el dolor de la extremidad. Las ortosis mas comúnmente empleadas son : ortosis tobillo-pie, ortosis rodilla-tobillo-pie, ortosis dinámica tobillo-pie, ortosis supramaleolar, ortosis de mano y ortosis toracico-lumbosacra. Las férulas estáticas se emplean para producir un estiramiento prolongado del músculo espástico en un intervalo submaximo- lo cual inhibe y facilita la acción del músculo antagonista vía huso muscular-, y para alargar las fibras musculares y la fascia. Se utilizan mas frecuentemente para la mano en reposo y la muñeca, la extensión del codo, la extensión de la rodilla y la dorsiflexion del tobillo.
Los programas de intervención temprana deben empezar en cuanto se hace el diagnostico del niño que se encuentra en riesgo de tener PCI. El modelo mas comúnmente usado es el interdisciplinario. Los padres son instruidos en actividades diseñadas para promover el desarrollo motor grueso y fino, así como de alimentación y lenguaje. Ademas de esto, los padres y en general toda la familia, reciben apoyo psicosocial. Aunque la mayoría de los estudios publicados hasta esta fecha cuestionan la validez de dichas intervenciones para mejorar las habilidades motoras de estos niños. es generalmente aceptado que mejoran su capacidad de socializacion así como la habilidad de los padres para manejar el niño en la casa y aceptar sus limitaciones.
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